No. 123/POESÍA

 

Dos poemas 



Carlos Pineda
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA-IZTAPALAPA



Malanga al alfil

¡Malanga al alfil! Dije
Y perplejas, las ratas se miraron.
Que las hormigas decidan. Dijeron (susurraron)

Y cual siempre,
levantaron un gran promontorio de polvo,
que alguien,

                           algún día,

                                                   llamará Babel

carlos-pineda1.jpg

 

 

carlos-pineda2.jpgGárgolas

A mil y metro del piso,
a  m i l í m e t r o  por suspiro
espeso el paso de su sangre al mover los músculos,
al tirar de los tendones cursivos.

Casi quietas, calmas,
miran la plaza,
con la filosofía entre las garras
y el habla trunca bajo el paladar hendido.

Esperan que el viento lleve la siesta al fauno;
y que comiencen los lamentos del estío.

En el momento preciso,
(con el sombrero ladeado así,
como de malamigo)
descienden, por fin,
a recoger su polvo,
a caminar un rato,
a contar los pasos de los presos,
los suspiros de los idos;

descienden como un párpado leporino,
a buscar geranios en el asfalto,
y alguna colilla que les cobije del frío...


 


Dibujos de David Becerra, Tecnológico de Monterrey, Ciudad de México