Agua / No. 244

Ahogamientos



Del sueño y otras muertes

Soñé,

  madre,

    un naufragio la otra noche.

Se alzaba la blancura de las aguas
sobre nuestro rostro.
Hídricos, los gorgoritos,
brumosos de ahogamiento,
no me dejaron despertar.




Apnea

Habrán sido diez kilómetros en mar abierto:
el braceo fatigó mis fuerzas,
el aire extraviado en sus caminos,
y otro cuerpo se abrió paso por mi boca.

Entró inasible el cauce por mis labios,
irrigó con desespero mi laringe,
   anegó mi traquea.
Y busqué otra vez el aire con las manos
mientras en cada pulmón
se volvían manglares mis alveolos.

Una con el agua,
amniótica,
estoy lista para mi alumbramiento
a quién sabe dónde.