DEL ÁRBOL GENEALÓGICO/No. 189


 

Dos poemas



Víctor Cabrera

 

 

V)
[DM, 1990]

 

                                                                                          It’s too late to change events
                                                                                   it’s time to face the consequence…
                                                                                                                Martin L. Gore


Ven y toca la llaga de nuestra fe marchita,
la dulce perfección de lo vacío.
Percibe la fractura del silencio
en el estruendo de estos sonidos materiales,
adivina el latido por su ausencia:
una estaca de sombra,
vocablos de sílex incrustados en el plexo.

Aproxímate a la quemadura de este clavo ardiente:
llevo rato colgado del evangelio de una grieta
y ahora sólo espero que algún día
la noche termine de caer.

Corazón,
están por consumirse mis plegarias.

Necesito un exorcismo de emergencia,
un mantra que derrita estas astillas en mi pecho.

Necesito mi propio
                               Jesús de utilería.
 

                                                        De la serie Antiguos elepés de una época perdida.




s/t
 

                                                                              Todo pensamiento debería recordarnos
                                                                                                     la ruina de una sonrisa.
                                                                                                                    E. M. Cioran
 

De cada lección hay un desaprendizaje,
un olvidarse de inmediato o paulatino.

Una salvaje borradura.

Por cada lámina de azoro,
un reverso de decepción y sombra,
una sonata de vidrio en los pulmones.

Esa nota que no alcanzó su aliento.

Nunca supe qué significa exactamente
aquel refrán que postula que no quiere
marcharse en realidad
quien alarga sin fin las despedidas.

(Yo que nunca aprendí a irme del todo
ni tampoco a quedarme enteramente.)

¿Es necesario, de veras, recordar
que de todo hay un auge y un domingo,
que un código derruye por dentro sus señales,
y que en cada canción
duerme un rumor de espanto?
 

 

Víctor Cabrera (Arriaga, Chiapas, 1973). Cursó estudios de licenciatura en Lengua y Literaturas Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México. Es autor de las plaquettes Diez sonetos (edición de autor, 2004) y Filipo contra los persas y otros cuantos epigramas (Rosa Celeste Ediciones, 2012), del volumen de fábulas y prositas Episodios célebres (Instituto Mexiquense de Cultura, 2006), y de los libros de poemas Signos de traslado (Juan Pablos / Leer y Escribir, 2007), Wide Screen (Bonobos/Conaculta, 2009), Guijarros (La Dïéresis, 2014) y Un jardín arrasado de cenizas (Bonobos / Conaculta, 2014). Compiló el volumen colectivo Una raya más. Ensayos sobre Eduardo Lizalde (FETA, 2010). Trabaja como editor de la Dirección de Literatura de la UNAM desde 2004. Fue becario del programa Jóvenes Creadores, del Fonca, en el rubro de Poesía y, de 2011 a 2014, miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte.