POESÍA CUBANA ACTUAL / No. 183

 
Mariene Lufriú Rodríguez
Pinar del Río, 1987
 



MI PADRE HA GASTADO SU ÚLTIMA PALABRA. Con minúsculas dosis de silencio fue
armando su burbuja y al límite de estos años la vida le parece un teatro inaudible
sin el coro ni las
máscaras.
Muda
se amontona su heredad en la odisea de sortear penélopes adustas
a la sombra de hijos solitarios y deformes.
A veces mi padre tiene unas ganas tremendas de gritar.
Puedo leerlo en la sintaxis de sus ojos.




Los puercos


Y gozan revolcándose en el lodo,
el mismo lodo gris que les aterra.
Escapan por la puerta que se cierra,
dibujan como nada lo que es todo.

Arenas movedizas en las plantas,
y un halo de firmeza en las miradas.
Las almas, como siempre, desalmadas.
Las santas sin altar; las putas santas.

Se forjan por azar sus propios cercos,
presumen de un instinto racional
y yo, que ya soy parte de estos tercos,

que tengo el corazón de un animal,
prefiero el lodo gris, como los puercos.
No traten de sacarme del corral



Pecera


No pude ser el pez; no tuve el arte
aun cuando mi espacio es la burbuja,
la gota estrecha, el ojo de la aguja,
la agónica manía de extrañarte.

No pude anclar la rabia a mi costado.
Soy torpe en las lecciones de paciencia.
Perdona la incisión. Salva la esencia
del fruto de este amor recién cortado.

Ayer no es cierto, es nada, es tierra yerma.
Yo no te quiero más, yo estoy enferma
(lágrima, sangre, furia, gana rara)

Perdona esta locura transparente.
No pude ser el pez. Soy la demente
que odia el vidrio gris que nos separa.



EL MARCO DE LA VENTANA me divide
en
dos.
Pongo sobre los codos una mitad.
Las piernas rectas soportan la otra.
El cuerpo se dobla como una tira de palabras
insuficientes para una historia.
Mi vida está hecha de gestos.
Irrepetibles.
Como mi país.
Mi país tiene ventanas que dividen cuerpos.
Tiene puertas cerradas que los contienen.
Como la foto de la pared
tampoco yo me salgo del marco.
Sólo puedo sacar al viento una mitad.
Me pongo una almohada de algodón bajo los codos.
El marco de la ventana y mi país
me han dejado el corazón a la intemperie.
Y eso
pesa
demasiado.

 



Puentes

                                                                               Hay en el sur más de un portón gastado
                                                                                                                        J. L. Borges

Escucho el tibio aullar de una manada
que es siempre el anagrama de una fuga.
Es casi más de un pueblo que conjuga
partir por una angustia demorada.

Crecí bajo el adiós del que se exilia
y deja en el umbral lágrima y canto.
También he sido presa del espanto
traidor que me cercena la familia.

Yo sigo inamovible, tras el muro,
solícita acrobacia del conjuro
que tantos han armado alguna vez.

Yo soy el vino eterno de esta uva
aun cuando a mi paso digan Cuba
y dentro de mi playa grite el pez.



Ciudadana común


Mi ciudad está enferma de carteles,
de callejas estériles y oscuras,
pero es patio de todas mis locuras
donde vierto mis heces y mis mieles.

Qué decir si he nacido entre sus senos
sin posible protesta o elección,
si fue aquí donde supe del varón,
de los malos, los torpes y los buenos.

Es mi patria este palmo de ceniza
quien me ha visto llorar entre la risa
y me ha dado una orilla y una playa.

Es aquí donde guardo mis mitades,
mi familia, mis tantas soledades.
Es aquí donde vuelvo aunque me vaya.

 

 


Mariene Lufriú Rodríguez. Poeta, narradora y filóloga. Licenciada en Letras por la Universidad de La Habana y graduada del Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso. Ha obtenido los premios Nosside Caribe 2003, Farraluque 2006, Mangle Rojo 2007 y Calendario 2009. Ha publicado los poemarios La ruta incierta (Ediciones Loynaz, 2008) y Todos los semáforos en rojo (Abril, 2009). Textos suyos aparecen en antologías y publicaciones de España, Italia, México, Venezuela y Perú. En 2010 representó a Cuba en el 1er Encuentro de Jóvenes Escritores e Intelectuales del Alba, celebrado en Caracas. En 2011 le concedieron la medalla 25 Aniversario de la Asociación Hermanos Saíz otorgada a jóvenes creadores del país.